La fotógrafa Angie Salgar Caballero, habilitó en el Centro de Arte Joven Andino (Alvear 534), su exposición Carnaval de Oruro y anata – Bolivia un país de fiesta, en la cual muestra la diversidad cultural y artística de la celebración carnavalera en esa ciudad.
Con el auspicio del Consulado de Bolivia en Jujuy, la paceña optó por iniciar en esta ciudad una serie de presentaciones de sus fotografías, que proseguirá en su país, donde el carnaval de Oruro fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Las fotografías, podrán ser admiradas hasta el próximo 28, de lunes a viernes de 9 a 20 horas, y los sábados de 17 a 20.
El origen del carnaval de Oruro tiene sus raíces en el periodo precolombino a través de las prácticas culturales y festivas de los pueblos Uru, Quechua y Aymara referentes al tiempo de siembra en el mundo andino.
Posteriormente, en la colonia, se prohibieron las prácticas culturales ancestrales y se impuso la religión judeocristiana. Sin embargo, la población originaria continúo rindiendo culto a la nueva religión en un proceso complejo de sincretismo religioso.
De esa manera, el santuario de la virgen de la Candelaria, patrona del carnaval de Oruro, se situó en la serranía sagrada de los Urus habitada por wakas, apus y achachilas y su festividad se establecieron en el tiempo de Anata que coincide con el tiempo del carnaval.
Entre 1900 y 1940, en la ciudad de Oruro irrumpieron las primeras comparsas de devotos a la virgen del Socavón, tropas de diablos, morenos y tobas que entre otros, bailaban y se postraban a sus pies para manifestar su devoción y solicitar protección.